Hacer un examen es probablemente una de las cosas más importantes que harás en una clase de matemáticas y por eso es importante hacerlo lo mejor posible. Aquí tienes algunas ideas que te ayudarán mientras haces un examen.
Estudiar antes de los exámenes.
Siempre deberías estar estudiando para el examen. Haz un poco cada día, o al menos empieza a estudiar 2 o 3 días antes del examen. NO empieces a estudiar la noche antes del examen.
Descansa bien
Duerme bien la noche antes del examen. Es importante estar bien descansado y mentalmente agudo cuando tomes el examen.
Haz tu acordeón
Haz una lista de conceptos/fórmulas importantes. Revise sus notas y haga una lista concisa de conceptos y fórmulas importantes. Asegúrate de conocer estas fórmulas y, lo que es más importante, ¡cómo usarlas!
Repasa los problemas de la tarea
No te limites a leer los problemas de la tarea. En realidad, repásalos. Escribir los pasos le ayudará a recordarlos. Asegúrate de que intentas hacer los problemas sin mirar las soluciones.
Cubre las soluciones de los ejemplos de libros o notas y trata de repasarlos. Cuando busques problemas del libro no olvides que la mayoría de los libros tienen una sección de repaso al final de cada capítulo que suele contener más problemas.
Busca las características comunes en los problemas. Revisar si corresponden a una misma sección de un libro. Esto proporciona algunas pistas sobre el proceso de solución. Durante un examen no tendrás esto para ayudarte. Así que, mientras revisas tu tarea busca identificar características que te den pistas sobre cómo identificar ese tipo de problema.
Haz un examen de práctica
Encuentra algunos problemas y trátalos con un examen de práctica. Date un tiempo límite y no uses tus notas o tu libro.
Durante el Examen
¡¡RELÁJATE!! Este es el primer paso para hacer un examen con éxito. Desafortunadamente, también es una de las cosas más difíciles de hacer. Cuanto más nervioso estés durante el examen, más probable es que olvides algo o te quedes en blanco. Lo peor que puedes hacer en un examen es entrar en pánico.
Lee el examen varias veces
Debes repasar el examen tres veces o as necesarias para que te sientas seguro. Primero, lee el examen y trabaja en todos los problemas que SABES que puedes hacer. Segundo, trabaja todos los problemas que crees que puedes hacer, pero no estás seguro. Por último, vuelve y trabaja los problemas restantes. De esta manera obtendrás todos los puntos que sabes que puedes conseguir.
Sé eficiente en el tiempo
Mira el reloj. No gastes una gran cantidad de tiempo tratando de obtener los puntos por un problema! Si pasas demasiado tiempo intentando obtener los puntos de un problema, es posible que no puedas terminar el examen y pierdas más puntos de los que obtuviste al dedicar todo ese tiempo a ese problema.
¿Estás atascado?, sigue adelante. Si un problema te resulta difícil de entender, pasa a otro problema y vuelve más tarde para terminar el problema. No pierdas tiempo tratando de conseguir 10 puntos y luego no ser capaz de terminar y perder 20 puntos porque se te acabó el tiempo.
Tengan en cuenta que es realmente lo mismo que el consejo anterior, pero era lo suficientemente importante como para hacerlo de nuevo y de una manera diferente.
Responde lo que sabes
Hazlo lo más fácil posible para que el instructor vea cuánto sabes. Intente escribir una solución bien razonada. Si su respuesta es incorrecta, el instructor le asignará un crédito parcial basado en el trabajo que muestras. No dejes que el instructor te lea la mente tratando de averiguar si sabías lo que hacías o no.
Nunca dejes un problema en blanco. Aunque no sepas cómo terminar el problema, escribe todo lo que sepas. El instructor sólo puede dar crédito parcial si hay algo escrito para el problema. Escribir algo no es una garantía de crédito parcial, pero no escribir nada es una garantía de no tener un acierto.
Lee el problema detenidamente
Asegúrate de leer las preguntas con cuidado y completamente antes de responder a la misma. Si el instructor pide que la respuesta sea escrita en una forma específica, entonces hazlo de esa forma.
¿Tiene sentido su respuesta? Asegúrate de que has obtenido una respuesta que tenga sentido.
Vuelve a revisar tu trabajo. Si el tiempo lo permite, repasa el examen y revisa cada problema. Esto significa volver a trabajar completamente el problema desde el principio.